Salimos a la calle
y nos cruzamos con infinidad de personas
a las que ni siquiera miramos.
Tan sencillo como resulta entregar
un poco de alegría al semejante.
Tal vez hoy, como ayer y como mañana,
se me olvidó transformar mi saludo
en un gesto amable,
evité la mirada de otros ojos
que anhelaban mi atención,
callé la palabra que podía convertir
el recelo en alegría.
Seguramente que hoy,
como ayer y como mañana,
podría haber sido más amable
pero iba en plan egoísta,
pensando solo en mis problemas.
Por ello…
Hoy, como ayer y como mañana,
quiero decir que lo siento,
pedir disculpas
por esa sonrisa que no regalé
y ese consuelo que no brindé.
jueves, 30 de enero de 2014
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18 comentarios:
Yo vivo en un pueblo y eso que describes no ocurre ya que por muy corto que sea el recorrido que haces siempre te encuentras con mucha gente conocida que saludas, sonríes, das los buenos días o te paras a hablar.....todo depende de cuanto la conozcas. he vivido en capitales y es muy triste que la gente no se saluda ni en el ascensor.Besicos
Si, tienes toda la razón.
Muchos días sale uno a la calle,
despistadillo. Pero amiga mía,
no vale; Todos los que tenemos al
rededor, tienen problemas.
Por aquí hay un refrán que dice.
(En todas partes se cuecen habas y
en mi casa calderas).
Hay que procurar, aunque cueste,
sonreír más, mirar con cariño,
tender una mano,etc. etc.
Hagámonos el propósito.
Te doy la enhorabuena por recordarnos que no estamos solos.
Muchos abrazos.
Aquí, en mi ciudad, pasa lo mismo, nos cruzamo y no nos miramos ni nos saludamos, pero antes, cuando era un pueblo pequeño, eramos como una familia, nos saludabamos todos y nos parabamos a hablar y a tomar un café, era bonito, se ha perdido todo lo bonito que teníamos antes de tanto progreso.
Gracías por tu visita y por el cariñoso comentario que me has dejado.
Besos, te deseo un feliz fin de semana.
Uno siempre debe de tratarse bien con el prójimo. Aprender a convivir en comunidad; y para lograrlo, solo se necesita empezar con algo tan sencillo como un Hola.
Por eso siempre hay que saludar, porque si tú saludos, pronto el mundo comenzará a hacerlo...
Una mirada amable y un saludo siempre pueden ser un buen comienzo del día, incluso cuando en lugar de respuesta directa lo que recibes es el susurro de las murmuraciones, preguntando quién eres o comentando la pinta que llevas, algo muy frecuente en los pueblos. Al menos siempre te queda la satisfacción de haber hecho lo que debías.
Besos
Ma Teresa, uno puede tener un no buen día de vez en cuando, los demás no tienen la culpa y merecen nuestra amabilidad, pero si te conocen sabrán que estabas preocupada, un abrazo!
El contacto humano hasta en la simplicidad se pierde ...un gesto amable cada día , entregado a otra persona, siempre será bienvenido y dará satisfacción mutua y más llevadera nuestra vida a veces , pienso, tan individualista....
Muy buen post..
Afectuoso abrazo
Cristina
Con lo poco que cuesta dibujar una sonrisa en nuestro rostro y su reflejo en el de los demás, ¿verdad?
Cuánta razón tienes.
Bss y... una sonrisa :)
Me uno a ese decir "lo siento", porque eso creo es patrimonio de todos. Demasiadas prisas hoy en día y demasiado mirarnos el ombligo. Muy bonito tu sentimiento de pesar MTeresa.
Besicos muchos.
Lo que nos diferencia de los animales, es precisamente, eso: Los sentimientos?
Estamos engullidos en urna vorágine de asperezas que poco a poco van minando nuestra vibrante naturaleza humana, pero a la vez, somos, o mejor dicho, hemos sido dotados para reconocer nuestros errores.
Me ha gustado tu relato.
un abrazo.
Hay que mirar a la gente a los ojos, es cierto y también hay que ir por la vida con menos prisa porque nos perdemos muchas cosas.
Al menos tú te has percatado de ello.
Un abrazo Mª Teresa.
A TODOS NOS PASA. GRACIAS POR LA REFLEXIÓN.
UN ABRAZO
Te entiendo, es una pena que muchas veces no nos acordemos de desplegar sonrisas.
Yo he comprobado, en más de una ocasión, que sonreír por la calle genera un bonito efecto dominó. Lo cierto es que la vida es muy corta para esconder sonrisas que tan bien nos hacen sentir, y prestar atención de más a los ingratos problemas.
Un abrazo
Cuántas veces hacemos lo que dices...
Una pena.
Muchos besos
Llevas mucha razón, esto nos ocurre con demasiada frecuencia, por desgracia.
Un abrazo
Un poema precioso, Maria Teresa.Y muy cierto todo lo que dices en él. Nos preocupamos demasiado de nosotros y muy poco de los demás.
Gracias por recordármelo.
Besos.
Una hermosa reflexion, a veces lo olvidamos pero en un segundo nos disculpamos con el corazon y sonreimos con el mismo.
Hermoso,
besos, feliz fin de semana!!
Esta situación depende del día, pero por desgracia cada día más, nos ha engullido el progreso y siempre vamos con la cabeza baja como si solo necesitásemos vernos a nosotros mismos. Está bien dar un toque de atención y reflexionar.
Besos
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