En mis sueños,
allí donde nadie puede alcanzarme
allí donde nadie puede alcanzarme
ni persona alguna puede penetrar,
me siento terriblemente segura
y a salvo de intromisiones ajenas,
sin necesidad de justificarme ante nadie.
Se trata de una fantástica manera
de ser una misma,
de salvaguardar mi dignidad
y de alejarme etéreamente
de la realidad que me encadena
a mis obligaciones sociales
y mis compromisos humanos.
En mis sueños
entrego mis besos a quien deseo
sin causar daño a nadie,
mi cuerpo vibra bajo manos
que nadie mas que yo conoce,
mis piel suspira por abrazos
que despierta no reconocería.
Cuando sueño
invento
imagino
creo
y actúo…
sin más ley que la del deseo.
